Un adolescente acusado del intento de robo y tiroteo contra el receptor de los San Francisco 49ers, Ricky Pearsall, no será juzgado como adulto, dictaminó un juez el viernes.
Cuando el adolescente fue acusado por primera vez del ataque hace un año, tenía 17 años. Ahora tiene 18, y durante el último año, su abogado, el defensor público adjunto Bob Dunlap, afirmó que ha mostrado un gran progreso en su rehabilitación. En una audiencia especial que concluyó el viernes, Dunlap argumentó que los cargos del adolescente no deberían ser trasladados al sistema de adultos.
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En la audiencia del viernes, donde un juez dictaminó que el caso permanecerá en el tribunal de menores, la madre de Pearsall leyó una declaración.
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