
Desde su reapertura en Semana Santa, Playa Madre ha marcado el compás de la temporada estival en la playa de La Arena. Situado sobre una terraza natural que domina los acantilados del Cantábrico, este chiringuito ofrece algo más que una bebida frente al mar: propone una experiencia integral , donde se combinan música en directo, cocina urbana y la mejor panorámica del litoral cántabro.
El adiós perfecto al verano
A medida que se acercan los últimos días de sol intenso, Playa Madre extiende sus horarios de apertura en septiembre , adaptándose al ritmo más pausado del final de temporada:
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Miércoles y jueves : 16:30 a 00:00
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Viernes y sábado : 13:00 a 01:00
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Domingo : 13:00 a 22:00
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Lunes y martes : cerrado
Este tramo final del verano se vive en Playa Madre con un aire más relajado, ideal para quienes buscan saborear el ocaso estival lejos de las multitudes , en un ambiente auténtico y natural.
Gastronomía que acompaña el atardecer
La oferta culinaria de Playa Madre sigue siendo uno de sus principales reclamos. Su modelo basado en foodtrucks permite recorrer el espacio mientras se elige entre opciones saladas, dulces o saludables. Entre los platos más demandados de esta temporada destacan:
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Alitas búfalo : con su inconfundible mezcla de picante y dulzor, cubiertas de sésamo.
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Bacon Cheese Fries : patatas doradas, queso fundido y bacon crujiente.
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Nachos Playa Madre : perfectos para compartir, con todo el sabor mexicano.
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Tequeños de queso : un bocado que se ha convertido en imprescindible.
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Poke Bowl : equilibrio perfecto entre frescura y nutrición.
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Bowl de yogur con frutas : refrescante, ligero y colorido.
Cada propuesta puede maridarse con cervezas artesanas , vinos blancos afrutados o cócteles veraniegos , preparados en el momento con productos de proximidad.
Una terraza sobre el Cantábrico
Lo que hace realmente especial a Playa Madre es su entorno. El paisaje natural , las mesas al aire libre , la brisa atlántica y el rumor constante del mar convierten cada visita en un pequeño ritual. Aquí no se va solo a comer o beber: se va a respirar el final del verano con todos los sentidos .
El espacio también ofrece sesiones de música en vivo y actividades puntuales, pensadas para despedir la temporada con una programación que combina cultura y ocio en un mismo marco escénico.
El sabor que deja el verano
Para muchos cántabros y visitantes, Playa Madre no es solo un lugar: es un símbolo emocional . Un escenario donde nacen recuerdos y se celebran despedidas. Con su actividad de septiembre, este chiringuito costero cierra la temporada con la misma fuerza con la que la abrió : mirando al mar, con la cocina en marcha y la música sonando.