Keila Copichka lleva tres meses con un único objetivo en su cabeza: reunir los 50 mil dólares que necesita para pagar los costos del tratamiento que le cambiaría la vida a Mateo , su hijo de tres años y medio que padece una discapacidad derivada de su nacimiento prematuro. Para hacerlo, tiene que viajar a México y tiene una fecha límite para el pago: el 9 de octubre .
Afortunadamente, Keila no está sola en esta batalla, a su lado está Santiago Lazarte , su pareja y papá de Mateo, toda su familia y un sinfín de personas que se unieron por la misma causa. Hasta el momento, c on rifas, festivales y donaciones, lograron reunir el 30% del monto total , pero todavía les falta el último empujón para llegar a la meta.
Mateo vive en San Miguel de Tucumán junto a su familia. Tiene