El papa León XIV pidió este sábado a miles de peregrinos presentes en Roma reflexionar sobre la situación de “tantos países y pueblos que tienen hambre y sed de justicia, porque sus condiciones de vida son tan injustas e inhumanas que resultan inaceptables”, en el marco del Jubileo de la Justicia.
En su discurso, el pontífice señaló que “donde no hay justicia no puede haber Derecho”, subrayando la relación entre justicia, Estado y legalidad, y haciendo eco de las enseñanzas de San Agustín sobre la importancia de ejercer la justicia al servicio del pueblo y con mirada divina.
León XIV destacó que la justicia “se hace concreta cuando se orienta hacia los demás, cuando a cada uno se le da lo que le corresponde, hasta alcanzar la igualdad en la dignidad y en las oportunidades entre los seres