A inicios de mes, el Bank of America advertía que el Perú muestra síntomas de una ‘enfermedad holandesa’ ante el auge del oro. Esta se da ante una gran entrada de divisas que fortalecen la moneda local y perjudican la competitividad de otros sectores exportadores. Sí, el precio del oro se ha disparado y la apreciación de la moneda se siente. Sin embargo, nuestra enfermedad tiene particularidades agravantes: la alta carga de ilegalidad y la captura del Estado. Una enfermedad criolla, tal vez.
Nuestra historia clínica tiene varios ‘booms’ que crónicamente no alcanzaron para tener un Estado capaz de asegurar un desarrollo efectivo para todos. Hoy, con el precio del oro duplicado en tres años y un Estado que no frena a la minería ilegal, se estima que este año la exportación de oro ilegal pod