En Aliexpress se puede encontrar de todo, hasta argumentos ideológicos; en el gran almacén digital todo es negocio, hasta para el Ministerio de Igualdad, esa guinda en el empalagoso pastel de un feminismo de chichinabo. Quién sabe, la ministra, una tal Ana Redondo, tal vez estaba buscando una remesa de bufandas palestinas, que ayer vendían en su página web a 1,71, gran ganga, y se encontró con las pulseritas para los maltratadores y ahí amarró el amaño. En el ministerio (igual) piensan que las pulseritas son como la que se ponen los «fachas» de toda la vida, que marcan como ganado a sus indeseables, pero resulta que son otras, que también seguían vendiendo ayer en la web del sitio de marras. También unas New Balance muy chulas.

La chapuza es una más de un gobierno que solo coge el palustr

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