WASHINGTON (AP) — El plan más reciente del presidente Donald Trump para reformar el sistema de inmigración de Estados Unidos desconcertó a algunos trabajadores inmigrantes y grandes empresas tecnológicas, por lo que la Casa Blanca intentó aclarar el sábado que la nueva tarifa de 100.000 dólares para visas de trabajadores tecnológicos calificados solo se aplica a los nuevos solicitantes y no a los actuales titulares de visas.
El viernes, el presidente, con el secretario de Comercio Howard Lutnick a su lado, firmó una proclamación que impondrá la nueva tarifa para lo que se conoce como visas H-1B, destinadas a trabajos altamente calificados que las empresas tecnológicas encuentran difíciles de cubrir.
“A quienes ya tienen visas H-1B y actualmente están fuera del país NO se les cobrarán 100