Alexander Albon se convirtió en protagonista negativo del Gran Premio de Azerbaiyán. El piloto británico fue sancionado tras un incidente con Franco Colapinto, pero la decisión de los comisarios abrió el debate sobre si la Fórmula 1 penaliza en la misma medida en que un error afecta a terceros.
En la vuelta 17, Albon intentó un sobrepaso por el interior en una curva poco habitual para maniobras arriesgadas. Su coche no estaba a la par del de Colapinto y el contacto trasero fue inevitable. El argentino trompeó, dañó su monoplaza y quedó relegado al fondo, sin posibilidad de recuperarse.
Los comisarios consideraron que el piloto de Williams fue “totalmente responsable” y le aplicaron diez segundos de recargo junto con dos puntos en la superlicencia. El problema es que el castigo