Seguramente has escuchado mil veces la frase “la casa siempre gana”, y es que esta creencia se ha vuelto tan popular que muchos lo aceptan como una verdad absoluta, una razón para nunca apostar. Mientras tanto, hay otros que lo ignoran por completo, creyendo que su suerte o habilidad los hará ser la excepción.

Sin embargo, la realidad se encuentra en un punto intermedio. No significa que sea imposible tener una sesión ganadora o que no puedas llevarte un buen premio, sino que, más bien, el sistema está matemáticamente diseñado para que, a largo plazo, el operador tenga una ventaja.

¿Cómo funciona el juego?

La ventaja de la casa hace referencia al margen de ganancia que el casino integra en cada juego. Podemos entenderlo como una pequeña comisión que asegura su rentabilidad con el tiemp

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