Los problemas entre miembros de una misma familia también llegan a la Justicia, de diversas maneras y con no pocos dolores.
No sólo el fuero específico, o el Civil, sino también el fuero Penal, suelen ventilar penosas actuaciones judiciales cuando surgen diferencias patrimoniales que no pudieron ser solucionadas entre quienes crecieron en el mismo hogar y terminan por ser reclamadas en los Tribunales de Córdoba.
Esto les sucedió a tres socios de la firma Centro Construcciones SRL, que también eran hermanos.
La empresa había sido fundada a principios de siglo por los padres de los tres socios, hasta que falleció el progenitor y se delegó la conducción de la administración en uno de los hijos.
Dos de ellos reclamaron a quien oficiaba de gerente haberse quedado con bienes del patrimonio d