El juez federal de La Plata, Ernesto Kreplak, procesó al empresario Ariel García Furfaro, dueño de los laboratorios HLB Pharma y Ramallo, por la fabricación y distribución de fentanilo contaminado que habría causado la muerte de 96 pacientes. Además, le dictó prisión preventiva y un embargo de un billón de pesos, como garantía por eventuales responsabilidades civiles y penales. En total, 17 ejecutivos fueron imputados en la causa.

Según una nota de Clarin, entre los procesados por el caso del fentanilo contaminado también se encuentra la madre de García Furfaro, Nilda, y su hermano Diego, quienes quedaron con prisión preventiva y embargos millonarios. En cambio, su otro hermano, Damián, recibió falta de mérito y recuperó la libertad, aunque permanecerá con restricciones judiciales.

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