Por Frano Giakoni Ramírez, director de la carrera de Entrenador Deportivo UNAB.
El triunfo de Los Cóndores frente a Samoa y su clasificación al Mundial de Rugby es mucho más que una hazaña deportiva. Es un símbolo de que Chile está aprendiendo a crecer en disciplinas que hasta hace poco parecían invisibles para la opinión pública. En un país donde el fútbol concentra la atención mediática y cultural, el rugido de este equipo nacional nos recuerda que el deporte chileno es más amplio, diverso y maduro de lo que solemos reconocer.
El estadio Sausalito de Viña del Mar fue testigo de esta fiesta deportiva: lleno de familias, niños y niñas con banderas, y un ambiente de camaradería que pocas veces se ve en espectáculos masivos. Más allá del resultado, la atmósfera reflejó que el rugby, con su