Históricamente, Ciudad Juárez ha sido vista como una ciudad lejana del epicentro político nacional; esto, a pesar de ser una de las más pobladas del norte y de tener una de las economías más dinámicas y fuertes de México. Durante el periodo neoliberal, esta frontera sufrió los embates de decisiones tomadas desde un escritorio en el centro del país, dejando de lado la realidad que vivimos aquí.
Que la presidenta Claudia Sheinbaum haya venido a Juárez a rendir cuentas de su primer año de gobierno envía un mensaje político contundente: Juárez no es periferia, es parte esencial del corazón de México. Este gesto, además de significar cercanía y escucha al pueblo, da continuidad al símbolo con el que Andrés Manuel López Obrador distinguió a nuestra ciudad al iniciar aquí su campaña presidencial