Las imágenes, publicadas en su cuenta de Instagram , muestran a Bündchen recostada sobre un manto de hierba fresca, sin maquillaje y con ese bronceado que solo el sol de Florida puede regalar. Pero no fue la única postal: la lluvia golpeando una ventana, palmeras meciéndose al ritmo del viento, nubes pintando el cielo sobre el mar y hasta un arcoíris en el campo completaron la colección de instantáneas que parecen gritar una cosa: "Aquí estoy, feliz" .
Entre todas esas fotos, hubo una que robó miradas: el brazo de su bebé de siete meses, cuyo nombre sigue siendo un misterio. El pequeño es fruto de su relación con Joaquim Valente , pero Bündchen ha preferido mantener los detalles en privado. "A veces todo lo que necesitamos es detenernos y mirar a nuestro alrededor" , escribió en