El legendario actor británico Daniel Day-Lewis volvió a pisar un escenario cinematográfico tras ocho años de ausencia y lo hizo de la mano de su hijo, el director debutante Ronan Day-Lewis.
Su regreso se concretó con el estreno de Anemone en el Festival de Cine de Nueva York, donde el tres veces ganador del Óscar reconoció que anunciar su retiro fue, en sus propias palabras, un error que hoy considera embarazoso.
Durante la presentación de la película el pasado 26 de septiembre, Day-Lewis, de 68 años, confesó entre risas lo incómodo que le resulta haber hecho pública su decisión de alejarse de la actuación tras El hilo fantasma.
“Hice el ridículo al anunciar que iba a dejar de trabajar, y probablemente me vi como un tonto aún mayor al volver”, citó People. Sin embargo, Lewis añadió que