Dormir no es solo un acto de reposo. Mientras el cuerpo descansa, el cerebro procesa experiencias, fija recuerdos y regula funciones vitales. Sin embargo, uno de cada tres niños y adolescentes españoles no duerme las horas necesarias , según el último informe FAROS de la Escuela de Salud del Hospital Sant Joan de Déu. Las consecuencias son múltiples: desde problemas de crecimiento y alteraciones metabólicas hasta un peor rendimiento académico y mayor riesgo de trastornos emocionales.
El documento subraya que el sueño profundo es clave en la secreción de la hormona del crecimiento, que la falta de descanso debilita el sistema inmunitario y aumenta la predisposición a infecciones y enfermedades autoinmunes. Además, dormir poco altera la producción de leptina y grelina, lo que favorec