Antonio Lucas Actualizado Viernes, 3 octubre 2025 - 02:49
Iba yo por capas al Congreso de los Diputados -digo «capas» porque paseo despacio y observo Madrid como se hace cuando uno explora o va de misiones-. En la Puerta del Sol escucho un jaleo gutural y me detengo en la desembocadura de la calle Carretas porque baja de allí ese rumor áspero de naturaleza caída. Al poco, unas decenas de hinchas radicales del KF Shkëndija Tetovo -equipo Macedonio que juega contra el rayo Vallecano- toma la zona. Como he leído que pertenecen a una organización neonazi los estudio con curiosidad de primatólogo -mis respetos a Jane Goodall- y cuando vuelven a gritar acelero el paso. A mí a cobarde no me gana nadie. Subo por la Carrera de San Jerónimo sorteando una superestructura peatonal de turis