A las 9 de la mañana del 25 de septiembre, una docena de agentes de inmigración irrumpió en el Centro de Oportunidad Económica para Jornaleros, en Pomona, y comenzó a interrogar a los trabajadores sobre su estatus migratorio.
Los agentes bloquearon la zona y comenzaron a interrogar no solo a los jornaleros, sino también a transeúntes, conductores estacionados y vendedores ambulantes cercanos: “¿Tienen documentos para trabajar en este país?”, preguntaban.
La redada duró apenas diez minutos, pero en ese lapso se llevaron a tres jornaleros: Benjamín Alcocer, Edgar Juventino Barrio-López y Fernando Salazar. Los tres fueron deportados de inmediato a Tijuana, México.
Ana Martínez, coordinadora del centro, expresó que les preocupa las políticas migratorias del presidente Trump porque saben que