En Palermo, la reciente firma del convenio entre la administración municipal y el Instituto Geográfico Agustín Codazzi (IGAC) ha abierto un nuevo frente de tensión política y ciudadana. El acuerdo, que supera los mil millones de pesos, busca actualizar el catastro del municipio, inalterado desde 2009. Sin embargo, lejos de ser recibido como un avance en materia de orden fiscal, ha desatado una fuerte inconformidad entre los habitantes, quienes cuestionan tanto las formas como las consecuencias de la decisión.
La medida implicará que más de 5.800 predios entren a tributar bajo el impuesto predial, con la promesa de fortalecer las arcas municipales en más de dos mil millones de pesos anuales. Pero la comunidad asegura que el costo de esta “justicia tributaria” recae desproporcionadamente so