Ser emocionalmente maduro no significa no sentir, sino -como explica el psicólogo Daniel Goleman, autor de Inteligencia emocional- reducir la distancia entre el impulso y una respuesta consciente.
"La madurez emocional consiste en reconocer tus reacciones, elegir con intención el siguiente paso y seguir adelante", señala Goleman y aconseja "convertir el drama en información y la reactividad en autoconocimiento".
Si has estado trabajando tu interior - - verás la evidencia en los momentos cotidianos. A continuación, diez situaciones que antes se sentían como minas personales y ahora se registran como datos, no como emergencias.
1. Alguien no está de acuerdo contigo
Antes, el desacuerdo se sentía como un ataque personal. Hoy es solo una diferencia de perspectiva. "Cuando alguien lleva