El proyecto Lago Azul viene mostrando un cambio notable: lo que antes fue un botadero de desmonte hoy se convierte en un parque sostenible y atractivo para las familias. Las obras contemplan la instalación de áreas verdes, senderos y espacios de descanso que se complementan con murales en relieve de inspiración costumbrista y cultural, creando una auténtica galería al aire libre. Además, el uso de materiales reciclados refuerza el mensaje de sostenibilidad. Todo ello apunta a consolidar un circuito turístico y recreativo en Condebamba.
“Estamos recuperando un espacio que nunca debió ser olvidado. Lago Azul será un pulmón verde y un punto de encuentro para todos”, señaló el alcalde Raúl Peña durante una supervisión reciente.