El pasado viernes, poco después de las dos y media de la tarde, Hamza Karimi , conocido artísticamente como Hamko, fue abatido a tiros mientras hablaba por teléfono y fumaba tranquilamente en la terraza de un bar de la avenida José Banús, en Marbella (Málaga). Vestía ropa ligera y parecía relajado, como quien acaba de llegar de vacaciones, sin imaginar que un hombre se le acercaría para dispararle a quemarropa, a plena luz del día.
La escena fue captada por cámaras de seguridad. Tras los disparos, Karimi intentó huir y logró refugiarse, herido, en un local cercano. Fue trasladado de urgencia al Hospital Costa del Sol de Marbella, donde falleció horas más tarde a causa de las heridas.
El presunto asesino, un ciudadano sueco de origen afgano de 38 años, fue detenido poco después por la