El Gobierno de Colombia dio un “incentivo perverso” a los guerrilleros de las FARC que se apartaron del Acuerdo de Paz al darles el mismo reconocimiento político de quienes depusieron las armas, dijo este lunes la defensora del Pueblo, Iris Marín Ortiz, en entrevista con la AFP.

El presidente Gustavo Petro intenta negociar la paz con todos los grupos armados, una de sus promesas de campaña. Pero, a diez meses de salir del poder, no ha logrado acuerdos significativos y 2025 se perfila como uno de los años más violentos de la última década.

“Se empezó a dar un tratamiento que es políticamente equivalente: el haber firmado el Acuerdo de Paz y haberlo cumplido, que haber desertado o no haberlo firmado jamás. Eso creo que fue un incentivo perverso”, manifestó a la AFP desde su despacho,

See Full Page