Ron Gourlay salió a hablar en plena crisis del Valencia CF e hizo suyo el discurso de Meriton de principio a fin . Con más tablas y bagaje en el mundo del fútbol que sus predecesores en esa silla, pero apoyado en las líneas maestras del relato que ha acompañado al club durante los últimos seis años: pedir unión, reforzar al entrenador de turno, escaparse de ponerle nombre al objetivo del club y activar el comodín del largo plazo para pedir "paciencia" al valencianismo . Nada nuevo bajo el sol.
La exigencia interna y el objetivo fueron las cuestiones más preguntadas. Ahí Ron quiso reforzar en todo momento a Carlos Coberán, del que dijo que "ya lo hizo el año pasado y lo volverá a hacer" y a sus jugadores, de los que dijo que "tienen mucha calidad" y que después de los movimientos de