Un equipo internacional de físicos ha logrado construir un “detector cuántico de mentiras” que permite verificar si un sistema cuántico —como una computadora cuántica— está realmente operando bajo principios cuánticos o simplemente imitando ese comportamiento.
El experimento se realizó con un sistema que incluye hasta 73 qubits . Los investigadores aplicaron una variante del llamado “test de Bell” —una prueba de correlaciones cuánticas— con el fin de medir propiedades que no pueden explicarse bajo la lógica de un sistema clásico. En este caso, detectaron correlaciones que violaban los límites permitidos para sistemas clásicos, con una desviación estadística tan elevada que descarta que el resultado sea mera casualidad.
En particular, desarrollaron estados cuánticos de “muy baja energía