CARACAS (AP) — Venezuela continuó el miércoles realizando ejercicios militares, esta vez en los estados La Guaira y Carabobo donde se localizan los dos mayores puertos del país, con el fin —según las autoridades— de estar preparada para impedir una paralización de sectores estratégicos ante una supuesta amenaza de agresión extranjera.

Todos estos entrenamientos tienen lugar en medio de la creciente tensión con Estados Unidos luego que el gobierno de esa nación ordenara el despliegue de buques de guerra en aguas del Caribe cerca de Venezuela.

Elementos de las Fuerza Armadas, milicias, policías y líderes comunitarios cercanos al gobierno del presidente Nicolás Maduro participaron de la jornada.

“Estos ejercicios son necesarios para que nuestro pueblo se instruya... evitar la parálisis” de sectores estratégicas en caso de una presunta agresión estadounidense, dijo el ministro de Defensa venezolano, Vladimir Padrino López, en declaraciones difundidas por la televisión estatal.

Algunas de las tareas del el ejercicio se centralizaron en la protección de instalaciones petroleras, petroquímicas, estaciones de servicios, gasoductos, depósitos de combustibles, estaciones de servicios, así como el aseguramiento y la protección de instalaciones eléctricas, telecomunicaciones y centros de salud, detalló el ministro.

“Todo eso hay que practicarlo para mantener el orden interno porque las amenazas causan caos. Nosotros debemos orientar a la población, concientizar a la población de que el caos sería nuestro peor enemigo”, señaló el jefe militar.

Los ejercicios militares, entre otras medidas como incorporar a voluntarios civiles armados que asistan a las Fuerzas Armadas, fueron ordenados por la administración de Maduro desde inicios de septiembre ante el despliegue militar estadounidense en el Caribe que, según Washington, tiene como objetivo el combate contra los cárteles de drogas latinoamericanos.

El viernes, el secretario de Defensa estadounidense, Pete Hegseth, anunció el que sería el cuarto ataque a una pequeña embarcación en el Caribe desde que arribaron los buques. Estados Unidos alega que las embarcaciones “trafican droga” y que sus tripulantes son “narcoterroristas”, como sería el caso de los cuatro que perecieron el viernes, según Hegseth.

Maduro ha descrito el despliegue naval estadounidense como una amenaza a la soberanía del país sudamericano y ha denunciado que sería el preludio de una presunta amenaza de invasión para forzar un cambio de gobierno. El gobierno de Estados Unidos no ha dado señales de que tenga previsto realizar una incursión terrestre con los más de 4.000 efectivos que están desplegados en la zona.

Los ejercicios de protección en zonas estratégicas se extenderán en los próximos días a todo el territorio venezolano, destacó Padrino López.

El ministro reiteró que buscan estar preparados en caso de una presunta agresión “desde el mar Caribe”. Afirmó que no se descarta “la introducción de fuerzas especiales para acometer acciones disruptivas dentro del territorio nacional”, sabotajes a los servicios públicos, “sabotaje a las vías y a la distribución de alimentos, asesinatos selectivos, etcétera. Todo eso hay que ponerlo sobre la mesa”.