El portavoz socialista en la Comisión de Sanidad de las Cortes de Aragón, Iván Carpi, consideró ayer que la dimisión de la supervisora de la UCI en el Hospital de Barbastro “ demuestra el malestar que hay entre la plantilla con las decisiones que llegan de Zaragoza. Es una más en la cascada de dimisiones que ha habido en los últimos meses, fruto del feroz plan de recortes que está aplicando Azcón”.
Y es que, señala en una nota, “lejos de poner una solución definitiva, el Gobierno de Aragón mantiene ese plan con el inexplicable silencio de los representantes del Partido Popular en la zona oriental, que están permitiendo que se desmantele el hospital y con ello, la calidad en un servicio público que tanto costó implantar”.
El presidente del PP de Huesca, Gerardo Oliván, tachó de “cíni