Las conversaciones de paz entre Israel y Hamas entraron en una fase decisiva esta semana en Sharm el-Sheikh, Egipto, con la participación de altos funcionarios de Estados Unidos, Qatar y Egipto. A dos años del inicio de la guerra, las negociaciones auspiciadas por Donald Trump apuntan a un acuerdo que permita liberar a los últimos rehenes israelíes y detener la ofensiva sobre Gaza. Sin embargo, el obstáculo sigue siendo el mismo que frustró los intentos anteriores: la exigencia de Hamas de liberar a comandantes palestinos encarcelados y la negativa de Israel a cruzar esa “línea roja”.
Según fuentes citadas por Haaretz y Euronews, el plan de la Casa Blanca se centra en un canje: rehenes israelíes por prisioneros palestinos elegidos por Israel. Todo lo demás –la retirada militar, el desarme