Por: Adriana Góchez 09/10/2025 06:34:28
Cuando se abre el telón del escenario para presentar el clásico del ballet El lago de los cisnes , el público queda maravillado con la música de Chaikovski. También se sorprende con la belleza que hay en las bailarinas convertidas en cisnes y los impresionantes pas de deux protagonizados por Odette, Odile y el príncipe Sigfrido. Sin embargo, hay un aspecto que pocas veces se ve: la demanda que implica llevar a la escena esta coreografía de Cuauhtémoc Nájera, basada en la original de Marius Petipa y Lev Ivanov.
Hay presión, frustración, cansancio, sudor, una alta concentración y unas ganas enormes de alcanzar la excelencia. Eso es parte de lo que La Razón presenció en uno de los ensayos de la Compañía Nacional de Danza, previo a las funcion