La reina Letizia nunca fue completamente aceptada por los Borbón . Desde su llegada a Zarzuela , recibió la indiferencia y recelo de la familia. Juan Carlos y Sofía la miraban con desconfianza. Solo la infanta Cristina le brindó cierto apoyo, por compartir la experiencia de casarse con un plebeyo. Aun así, Felipe VI, supuestamente enamorado, decidió protegerla . Incluso llegó a amenazar con renunciar al trono si no le permitían seguir con la relación.
Una vez convertida en reina, Letizia comenzó a consolidar su influencia en la Casa Real . La crisis del caso Nóos y las polémicas de Juan Carlos I facilitaron que Letizia impusiera cambios significativos. La primera medida fue romper los vínculos institucionales con el resto de la familia. Con el tiempo, Juan