Practicar yoga después de los 65 años puede mejorar la movilidad, la fuerza, el equilibrio y hasta la calidad del sueño, según especialistas en longevidad.
Aunque la edad avanzada suele asociarse a limitaciones físicas, existen asanas (posturas) especialmente recomendadas por su bajo nivel de dificultad y alto impacto en el bienestar.
Beneficios comprobados del yoga en la tercera edad
De acuerdo con estudios médicos y experiencias clínicas, el yoga ayuda a reducir la presión arterial, aliviar dolores articulares y musculares, mejorar la postura y disminuir los niveles de estrés. Además, promueve la concentración y la conexión mente-cuerpo, dos aspectos clave para un envejecimiento saludable.
“El yoga a partir de los 60 o 65 años tiene además beneficios terapéuticos en personas con artr