Según el Servicio Geológico de Estados Unidos, un fuerte sismo de 7.4 sacudió a Filipinas.
El sismo ocurrió frente al lado oriental de la Isla de Mindanao, a unos 123 kilómetros de la capital de la Isla Davao, a una profundidad de 58.1 kilómetros.
De acuerdo con el Instituto Filipino de Vulcanología y Sismología dijo que se espera un “tsunami destructivo con olas de altura potencialmente mortal”.
Del mismo modo, advirtieron a las personas en las zonas costeras del este y sur de Filipinas que evacúen.