La incertidumbre política vuelve a sacudir al país. En medio de tensiones entre el Ejecutivo y el Congreso, se habla nuevamente de una posible vacancia presidencial. De concretarse, Perú sumaría siete presidentes en apenas nueve años, una cifra que no solo alarma por su magnitud, sino que evidencia una profunda crisis de gobernabilidad que parece no tener fin.
Este escenario de inestabilidad ha debilitado la confianza ciudadana en las instituciones democráticas. La constante rotación de mandatarios, muchas veces marcada por escándalos, enfrentamientos y decisiones apresuradas, ha generado un clima de desafección política. La población, cada vez más desencantada, observa cómo las prioridades nacionales se diluyen en medio de disputas de poder.
Analistas advierten que este récord negativo