El homenaje más profundo no siempre se da en palabras. A veces, se expresa en gestos, en símbolos cargados de historia, en silencios compartidos. Así fue como Estudiantes de La Plata acompañó el último adiós a Miguel Ángel Russo, uno de los grandes ídolos de su historia, en el velatorio que tuvo lugar en La Bombonera.
Una delegación encabezada por el presidente Juan Sebastián Verón, junto a parte de la comisión directiva, se hizo presente para rendirle tributo al hombre que vistió más de 400 veces la camiseta albirroja y que, fiel a sus convicciones, jamás defendió otro escudo dentro del campo de juego. La institución platense llevó al lugar una serie de objetos significativos, verdaderas reliquias para su familia y para la historia pincha: una camiseta firmada por todo el plantel profe