En plena década de 1970, Houston vivió uno de los episodios más oscuros de su historia criminal. Dean Arnold Corll, conocido como el "Candy Man" o "Hombre de los caramelos" , fue responsable de, al menos, 28 asesinatos de jóvenes entre 13 y 20 años.
Su macabro modo de obrar, que incluía el secuestro, tortura y asesinato de sus víctimas, dejó una marca imborrable en la comunidad texana general y el crimen en particular.
Corll se mudó a Houston de muy joven tras haber nacido un 24 de diciembre de 1939 en Fort Wayne, Indiana. Durante años, fue conocido en la comunidad por su negocio de dulces, lo que le valió el apodo de "Candy Man".
Sin embargo, tras el cierre de su tienda en 1968 y según una nota de Criminalminds, su fachada de hombre amable comenzó a desmoronarse , revelando