La provincia de Ciudad Real continúa teniendo tramos conflictivos en su red viaria, a pesar de las mejoras ejecutadas en los últimos años. Aunque la Dirección General de Tráfico (DGT) ya no publica listados oficiales de “puntos negros” y los sustituye por análisis de siniestralidad, los datos y reportes disponibles apuntan a que la A-4, la N-430 y la N-502 continúan siendo las vías más peligrosas de la provincia.
Según el último informe de Automovilistas Europeos Asociados , siete segmentos de la red estatal que discurren por la provincia registran índices de siniestralidad hasta diez veces superiores a la media nacional.
Entre los puntos más conflictivos destaca el tramo de la A-4 entre los kilómetros 159 y 165 , a las afueras de la capital, donde se han producido numerosos ac