En el pulso industrial de Madrid late un corazón cervecero único. Se trata de la fábrica de El Águila en San Sebastián de los Reyes , la última instalación de producción industrial de cerveza en la capital, donde la tradición de 125 años se mezcla con la tecnología para crear uno de los iconos líquidos de la ciudad.
Su historia comenzó lejos de allí, como explica el maestro cervecero Pablo Ruíz mientras nos guía por las entrañas de la planta. "La primera fábrica estaba en la calle General Lacy , cerca de Atocha. Era importante porque la malta venía en tren en aquella época, pero se quedó pequeña y se trasladó la producción aquí", relata.
El secreto de su receta reside en cuatro elementos fundamentales . "Solo hay cuatro ingredientes básicos", desgrana Ruíz. "Una malta de c