La Policía brasileña ha desmantelado una fábrica clandestina de bebidas alcohólicas en São Bernardo do Campo , tras una investigación iniciada por la muerte de tres personas que consumieron vodka adulterado . El operativo reveló una red ilegal de producción que utilizaba etanol mezclado con más del 40% de metanol , una sustancia altamente tóxica.
Las víctimas confirmadas son Bruna Araújo de Souza (30 años) , Marcos Antônio Jorge Júnior (46 años) y Ricardo Lopes Mira (54 años) . Los productos contaminados incluían vodka, ginebra y whisky , distribuidos en locales sin control sanitario.
Durante la operación, se cerraron diez establecimientos comerciales y se confiscararon unas 10.000 botellas . El propietario del taller enfrenta cargos por falsificación y adulter