En el Amazonas, una zona donde la selva es espesa y los ríos son las únicas carreteras medio visibles, Néstor Gregorio Vera Fernández, alias Iván Mordisco, máximo cabecilla de las disidencias de las Farc, es como un fantasma: muchos hablan de él, pero pocos lo ven. Este sujeto sanguinario ha encontrado en esta zona de Colombia una creencia ciega en la brujería apoyada por indígenas, pero también hombres armados que lo cuidan.
SEMANA habló con el estricto grupo de hombres y mujeres de las Fuerzas Militares y de Policía que le siguen el rastro día y noche . Los detalles son impactantes y parece que se trata de una película de Halloween, pero es la realidad de muchos criminales en Colombia: la brujería para supuestamente escapar de la justicia.
“Ese bandido no sale de esa zona desde hace m