CIUDAD DE MÉXICO:- Desde que se empezó a especular sobre la mudanza de los Mayos de Navojoa a Tucson, Arizona, después de la exitosa Serie del Caribe en Mexicali, un sonriente Víctor Cuerva se sacaba la “selfie” con sus colegas de la Liga Mexicana del Pacífico.
Pero no soltaba prenda, dejando a la imaginación, el mensaje. Ya fuese la permanencia de la tribu en casa o un traslado a Estados Unidos, lo que finalmente se anunció en la junta de presidentes del mes de mayo.
Todo parecía ir sobre ruedas con la pretemporada en marcha sin sobresaltos. Hasta que tronó el cohete por un asunto tan predecible como el migratorio, conocido que en esos enjuagues los americanos no tienen palabra de honor.
Menudo problema se ha venido encima no solo a Cuevas y su buen humor, sino también a la LMP y su nu