Bradley Wiggins ha decidido hablar alto y claro. El primer británico en conquistar el Tour de Francia asegura que fue sacrificado por el equipo que lo llevó a la cima, Team Sky, en plena tormenta por las investigaciones de dopaje que marcaron el ocaso de su carrera. “Me tiraron debajo del autobús para proteger a otra persona” , asegura en una entrevista con The Times, a propósito del lanzamiento de su autobiografía The Chain. “Había algo más grande en marcha… saldrá a la luz”, avisa.

El ciclista de Kilburn, que alcanzó la gloria en 2012 con la victoria en la Grande Boucle y el oro olímpico en contrarreloj apenas semanas después, siempre ha defendido su inocencia tras la filtración de sus TUEs (Autorizaciones de Uso Terapéutico) por el grupo de hackers Fancy Bear en 2016. Aquella reve

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