WASHINGTON (AP) — La coalición de capítulos de la Asociación Nacional para el Progreso de las Personas de Color (NAACP, por sus siglas en inglés) de Nueva York acababa de iniciar su convención estatal anual cuando Letitia James, miembro de larga data y fiscal general del estado, canceló su aparición.
James acababa de ser acusada por el Departamento de Justicia por presunto fraude hipotecario, un cargo que ella calificó de “infundado” y “una grave violación de nuestro orden constitucional”.
Para los organizadores de la convención de Nueva York, el momento fue alarmante y subrayó la importancia del encuentro, que contó con varias sesiones sobre la construcción de poder político a escala estatal en respuesta a lo que los líderes de la NAACP calificaron como ataques federales contra el biene