La emoción de la Ofrenda de Flores ha vivido este sábado uno de sus momentos más románticos y que ya es todo un clásico de este día: las pedidas de mano. Pasadas las 12.30 horas, Fernando sorprendía a su pareja, Patricia, hincando rodilla en plena plaza del Pilar para pedirle matrimonio ante miles de personas, justo a su llegada al manto de la Virgen.
La escena no podía ser más emotiva: entre claveles, música y devoción, se convirtió en uno de esos instantes que trascienden y que llenan de sentido, si cabe aún más, a un día tan especial. Cada 12 de octubre, miles de oferentes recorren la plaza para rendir homenaje a la Virgen, y en medio de ese desfile de tradición y sentimiento, Fernando decidió dar un paso más en su historia de amor con Patricia .
“Lo tenía planeado desde hace much