Nostalgia, euforia, familias enteras que llegaron juntas, cánticos , abrazos entre desconocidos, aplausos de pie y lágrimas. Así fue el escenario de la primera noche de Silvio Rodríguez en el Movistar Arena de Buenos Aires . El cantautor cubano, histórico referente de la música latinoamericana, regresó al país luego de siete años y lideró una fiesta colectiva de canciones y memoria.

La cita del sábado lo encontró con la voz "catarreada" , según sus propias palabras. Silvio se disculpó en más de una oportunidad mientras bebía té caliente, entre versos. Sin embargo, su característica fuerza y el caudal de su voz permanecieron intactos para entregar una veintena de canciones.

Desde la apertura con Ala de colibrí hasta el cierre con Rabo de Nube, el recorrido unió himnos com

See Full Page