Morante de la Puebla se cortó ayer la coleta alrededor de las 19:40 horas de la tarde, de una forma totalmente inesperada. El torero acababa de dar la vuelta al ruedo con las dos orejas del cuarto toro, que lo había cogido a la salida.
Tras este hecho, el torero sevillano se fue a las tablas conmocionado y lloró de impotencia. Sin embargo, Morante de la Puebla volvió a salir del callejón para volver a torear entre una gran ovación por parte del público.
La emocionante tarde que se vivió en Las Ventas continuó por las calles de Madrid . Una gran cantidad de personas lo llevaron en volandas a su salida por la Puerta Grande. En concreto, lo llevaron en volandas por la calle Alcalá en dirección al Hotel Wellington, donde se alojaba el torero.
Precisamente, desde allí, la multit