El presidente estadounidense, Donald Trump, subrayó en el Parlamento israelí (Knéset) que este lunes 13 de octubre, en el que se va a firmar el final de dos años de guerra entre Israel y Hamás, es un día "de profunda alegría, de gran esperanza, de fe renovada", que marca no solo el fin de un conflicto, sino el de "una era de terror y muerte".
"Nos reunimos en un día de profunda alegría, de gran esperanza, de fe renovada", dijo al inicio de su intervención tras haberse reunido poco antes con familiares de rehenes israelíes.
El líder republicano consideró que "esto no es solo el fin de una guerra, es el fin de una era de terror y muerte y el comienzo de una era de fe, esperanza y de Dios".
Este es el amanecer histórico de un nuevo Medio Oriente
Es el inicio, añadió, de "una armonía durad