Por lo general, todo el mundo en España es titular de una cuenta bancaria. Este es el contrato financiero que se establece entre una persona o empresa con una entidad, esta última la encargada de gestionar, administrar y custodiar el dinero que el cliente deposite en el banco. En ellas se permite el depósito de una de las transacciones más importantes como es el recibo de la nómina, así como prestaciones económicas u otros ingresos personales.
Por lo general, la cuenta puede ser particular o tener varios titulares. No obstante, la primera opción, la más independiente, es en la mayoría de ocasiones lo más común, sobre todo en las nuevas generaciones. Esto genera así algunas dudas sobre lo que ocurre cuando un titular de una cuenta bancaria fallece. Y, ojo, porque así como la mayoría de pap