A los más entrados en años, pero especialmente a quienes allí hicieron la 'mili' les ha venido a la cabeza enseguida el recuerdo de aquellos años en lo que fue un antecedente del gran almacén de bombas y misiles destinados a cazas y drones de combate que, por el momento, no operan en la base aérea de Son Sant Joan, lugar elegido por el Ejército del Aire para levantar esta infraestructura tan controvertida, pero que no es nueva en la Isla, pese a lo llamativo de su contenido y misión. El futuro equipamiento, armado con las pertinentes medidas de seguridad al edificarse junto a un aeródromo civil de gran capacidad y tráfico, tendrá un coste de 1'8 millones de euros y una capacidad para 75 toneladas de explosivos , aunque la intención es que sea mucho menor el espacio ocupado.
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