El mercado cambiario argentino registró una jornada atípica, marcada por un ajuste abrupto del tipo de cambio de referencia y una señal política que reconfiguró expectativas. El dólar mayorista sufrió la mayor caída diaria desde mayo y retrocedió 5% hasta los $1.349 , movimiento que sorprendió a operadores por su magnitud y por el catalizador que se difundió en simultáneo. En el circuito minorista, el Banco Nación (BNA) cerró con un precio de $1.375 para la venta , alineado con la tendencia descendente. La dinámica se dio en un contexto de menor demanda y un giro en las coberturas de muy corto plazo.
La baja se atribuyó directamente a la intervención del Tesoro de Estados Unidos en el mercado local. El secretario Scott Bessent anunció la semana pasada que ese país comenzó a c