Las compañías automovilísticas con fábricas en España esperan que el aumento de ventas de modelos electrificados, que se han disparado casi un 100% en lo que va de año, impulse la producción local

Las marcas chinas de coches ya suman más ventas en España que Toyota, líder del mercado

España ha pasado años por detrás de sus socios europeos en cuanto a la venta de vehículos 'eco'. Sin embargo, en los últimos meses, ha comenzado a repuntar, en parte, gracias al aumento de la oferta y a la aparición de modelos a precios más económicos. Muchos de ellos, fabricados en el mercado chino, porque la producción de eléctricos en España va mucho más despacio.

Al mismo tiempo, en otros mercados europeos, aunque las ventas de modelos bajos en emisiones no vayan mal, los grandes fabricantes del sector temen que la demanda no esté siendo lo suficientemente fuerte como para acelerar la transición hacia la movilidad sostenible. Más aún cuando la Unión Europea mantiene sus planes de vetar los coches y furgonetas nuevas que emitan CO2 en el año 2035, aunque el sector esté presionando para conseguir metas más flexibles.

Si se ven los datos del mercado español en los últimos meses, solo en septiembre, más de dos de cada 10 vehículos matriculados –incluidos turismos, comerciales e industriales– entraban dentro de la categoría de electrificados, donde están los eléctricos y los híbridos enchufables. En el tercer trimestre del año, el que coincide con los meses de verano, las ventas de este tipo de modelos se han disparado casi un 100%. Y si se mide el aumento en lo que va de año, la cifra de turismos (coches) electrificados que llegan a las carreteras españolas repunta en un 98%. Ya son casi el 20% de todas las ventas de vehículos.

En cuanto a cuáles son los modelos más vendidos, la categoría de eléctricos está encabezada en lo que va de año por el Tesla Model 3 (7.667 unidades). Y, en la de híbridos enchufables, el BYD SEAL U (6.752 unidades). No son dos modelos baratos, pero tampoco están entre los más caros, porque ese Tesla parte de los 35.000 euros y el BYD, de 32.000, aunque esos precios suelen incluir todo tipo de descuentos. En el siguiente gráfico se resumen los modelos más vendidos, en eléctricos e híbridos enchufables, en lo que va de año.

Los fabricantes señalan que los datos de electrificados son buenos, en un momento donde el conjunto de tecnologías va bien. “Son cifras positivas que nos permiten mantener la previsión de cierre en torno al 1,1 millón de unidades”, entre todo tipo de motores, explican fuentes de la patronal, Anfac. “Y para mantener esta evolución, impulsada principalmente por el buen ritmo del mercado electrificado, hay que seguir mandando un mensaje claro al ciudadano de que un coche electrificado es una opción totalmente viable. Al esfuerzo de las marcas con una oferta que ya suma más de 280 modelos eléctricos e híbridos enchufables solo para turismos, hay que dotar con nuevos fondos al Moves”, en referencia a los planes de incentivos públicos, “y mejorar su eficiencia a través de ayudas directas que permita seguir fomentando el mercado”.

Necesidad de acelerar su cuota de mercado

Uno de los problemas de fondo es que, aunque aceleren las ventas, la cuota de vehículos electrificados en el conjunto del parque automovilístico español aún es significativamente pequeña. Con los últimos datos disponibles, que corresponden al cierre de 2024, en España hay más de 26,4 millones de turismos. De ellos, alrededor de 455.000 contaban con una etiqueta 'eco', que engloba a los híbridos enchufables y a los eléctricos. Estos últimos son más de 200.000.

Es decir, los dos tipos de enchufables suponían al cerrar el último año un 1,7% del mercado español y, aunque en los últimos meses hayan ido arañando terreno hasta las mejores cuotas hasta la fecha, aún están lejos de suponer un cambio radical en un parque automovilístico que, además, está muy envejecido. Por ejemplo, hay más de siete millones de coches que tienen más de 20 años de antigüedad. Y, al cierre de 2024, aún había más de 10 millones de turismos a gasolina y 13 millones, de diésel.

Pese a ese lento avance, hay cierto optimismo con la electrificación. “Estamos repuntando con unas cifras muy notables”, asegura Arturo Pérez de Lucia, director general de Asociación Empresarial para el Desarrollo e Impulso de la Movilidad Eléctrica (Aedive) que agrupa a todos los eslabones de la industria. “Estamos por debajo de lo que se predecía a estas alturas”, añade, “en especial, si miramos a los objetivos del PNIEC [el Plan Nacional Integrado de Energía y Clima], que sí establece unos objetivos de 5,5 millones de vehículos eléctricos a 2030”. Una meta que, hoy por hoy, está más cerca pero sigue siendo difícil de conseguir.

No tan lejos del resto de la UE

No vamos tan bien como para conseguir fácilmente los objetivos de un parque de bajas emisiones, pero tampoco estamos tan lejos del conjunto de Europa. Al cierre de 2024, la cuota de mercado de eléctricos e híbridos enchufables en el conjunto de la Unión Europea se situaba en el 3,9%, según los datos publicados por la patronal europea de fabricantes, ACEA.

Solo en eléctricos, únicamente cuatro países estaban por encima del 4%. Ahí destacan los mercados nórdicos que han ido mucho más rápido que el resto: Dinamarca supera el 7%; Suecia, roza el 6%; y Países Bajos y Luxemburgo están cerca del 5%.

El temor de los grandes fabricantes es que la demanda, aunque tire, no sea suficiente para lograr esta transición. En lo que va de año, en el conjunto de la UE se han vendido más de 1,1 millones de coches eléctricos y más de 631.000 híbridos enchufables, pero la evolución es muy desigual. Por ejemplo, solo en eléctricos –entre enero y agosto–, las ventas aumentan casi un 40% en Alemania, pero en Países Bajos tan solo avanzaron un 5% y en Francia cayeron un 2%. De hecho, hay fabricantes que ya han anunciado despidos ante un enfriamiento de la demanda. Mientras, España destaca como el mercado donde más avanzaron hasta agosto las matriculaciones de eléctricos puros, con un despegue de ventas de más del 95%.

Más ventas para acelerar la producción

Europa teme un frenazo, mientras las automovilísticas con fábricas en España esperan que la demanda sea la base para garantizar la producción a nivel local. “La producción de vehículos se hace bajo pedido. No se fabrica con stock”, explican desde Anfac. “Es necesario incentivar la demanda de vehículos con enchufe para que las fábricas españolas que ya tienen adjudicados modelos eléctricos eleven su fabricación”, añaden.

En el siguiente cuadro se ven los modelos electrificados que se producen en las fábricas españolas de los diferentes grupos automovilísticos.

“Los grupos automovilísticos están invirtiendo no solo para transformar las líneas de producción hacia los vehículos cero emisiones, también para que tengan una flexibilidad cada vez mayor para poder fabricar en la misma línea vehículos de cualquier tecnología”, es decir para adaptarse a la diferente demanda, indican desde Anfac.

De hecho, esa necesaria transformación de las líneas de fabricación hacia los modelos eléctricos está, en parte, detrás de la menor producción de coches en España en lo que va de año, según explica el sector. En concreto, entre enero y agosto se ensamblaron en España 1,47 millones de vehículos, un 7% menos que un año antes.

De ellos, la inmensa mayoría siguen siendo de motores convencionales, pero los enchufables, avanzan. En esos ocho meses, la producción de electrificados repuntó 4,1%, hasta algo más de 145.096 unidades. De esta forma, son casi el 10% del total y un punto porcentual más que un año antes. Una de las marcas fabricadas en España es Ebro, en la antigua factoría de Nissan en Barcelona. La semana pasada, Ebro reconoció que espera superar los 13.500 coches vendidos este año, y hasta septiembre, acumulaba más de 9.000 unidades comercializadas.